Treinta años han pasado desde que Cibell Naime conmocionara al país con un doble asesinato que conmocionó a la sociedad venezolana. La joven de 18 años, motivada por adquirir un gato angora, urdió un plan que la llevó a robar a su padre, falsificar un cheque y finalmente, quitarle la vida a dos personas.
El desencadenante: un gato
Todo comenzó a finales de noviembre de 1994, cuando Cibell, obsesionada con tener un gato, encontró un anuncio en el periódico. Tras negociar la compra con Miguel Antonio Tauil Musso, un criador de gatos, se enfrentó al problema de no tener el dinero suficiente. Fue entonces cuando decidió robar un cheque de su padre y falsificar su firma para pagar al vendedor.

El fatal encuentro
Días después de adquirir el gato, Cibell llamó a Tauil haciéndose pasar por otra persona para comprar un perro salchicha. El encuentro se pactó en la casa de Tauil en Los Naranjos, donde la joven, armada con la pistola de su padre, lo amenazó para que le devolviera el dinero del cheque. Sin embargo, la situación se salió de control y un forcejeo terminó con la vida de Tauil. Temiendo ser descubierta, Cibell también asesinó a un joven que se encontraba en el lugar.
La investigación y el arresto
Las autoridades, inicialmente, investigaron el caso como un robo o un ajuste de cuentas. Sin embargo, las pistas condujeron a Cibell Naime. Las huellas dactilares encontradas en el arma del crimen coincidían con las de la joven, y los testimonios de testigos, junto con el descubrimiento del cheque robado, la señalaron como la principal sospechosa.
En enero de 1995, Cibell fue arrestada y confesó los crímenes. Fue condenada a 30 años de prisión, pero tras cumplir parte de su condena, salió en libertad bajo régimen de vigilancia.

Un caso que marcó una época
El caso de Cibell Naime sigue siendo uno de los más impactantes de la historia criminal venezolana. La joven, aparentemente normal, cometió un crimen atroz motivado por la obsesión por tener un gato y la necesidad de ocultar sus acciones. Este caso nos recuerda la fragilidad de la vida y las consecuencias devastadoras que pueden tener nuestros actos.
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Cibell Naime, dos muertes y un gato: se cumplen 30 años del crimen que conmocionó a Venezuela
El 13 de diciembre de 2024 se cumplen 30 años del crimen cometido por Cibell Naime. Tras hurtar dinero de su padre para comprar un gato, asesinó a dos personas mientras vivía en Los Naranjos, El Hatillo, en Miranda. Aunque a la fecha la mujer se encuentra en libertad, reinsertada en la sociedad pero alejada de la vida pública, el crimen se convirtió en uno de los más mediáticos en la década de los noventa.

En 1994 Cibell Naime no aceptaba la postura de su padre sobre que tuviera un gato. A finales de noviembre de ese año se topó con un anuncio de venta de mascotas en un periódico, que incluía un gato angora. Llamó al número del anuncio para solicitar comprar al felino. La negociación la hizo con Miguel Antonio Tauil Musso, un abogado de 30 años de edad que se dedicaba a comercializar animales domésticos.
La negociación inicial entre Cibell y Miguel por el gato fue de 20 mil bolívares (118 dólares en la época). El monto era alto y la joven no tenía el dinero suficiente para costear la compra del felino. Por ello decidió ingresar a la oficina de su padre, hurtó uno de sus cheques y falsificó su firma.
Cibell le llamó Jazmín al gato de cinco meses, de raza angora y color blanco. Al llegar a casa con el animal ella mintió y dijo que una amiga se lo había regalado. A pesar de las dudas, su padre le permitió quedárselo. Días después, Shauki se dio cuenta de que faltaba un cheque del extinto Banco Unión. Al buscar y no encontrarlo, decidió reunir a la familia y luego de consultarlos, todos negaron saber del cheque, incluida Cibell. El hombre amenazó con castigo a quien hubiera hecho el hurto.
Una semana después de comprar el gato, Cibell Naime llamó a Miguel Tauil y se hizo pasar por otra persona para presuntamente comprar un perro salchicha. Acordaron que el punto de encuentro fuera la casa de Miguel en Los Naranjos. Cibell llevó al encuentro una pistola calibre 7.65 Walther PPK, también propiedad de su padre.
Para presionar que le devolviera el cheque sacó el arma para amenazar, pero hubo un forcejeo que acabó con la vida de Miguel, tras el asesinato apuntó al joven de 19 años y me dijo que la perdonara, que ella no era mala persona, pero no podía dejarlo vivo porque era testigo.
Tras el doble asesinato, se marchó del lugar y colocó el arma donde su padre la guardaba en casa. Funcionarios de seguridad encontraron los cuerpos horas más tarde. La investigación inicial de la muerte de ambos manejaba la hipótesis de un intento de robo o un ajuste de cuentas. Aunque aparentemente Cibell Naime buscó que no la relacionaran, al final los guardias de la urbanización de Miguel y su propia madre ofrecieron datos que permitieron dar con su paradero.
La investigación por doble asesinato
Tras investigaciones, los detectives determinaron que las huellas dactilográficas de los chasquidos del arma pertenecían a una mujer. Las huellas no aparecían en los registros de personas con antecedentes penales, por lo que se empezó a buscar a la última mujer que tuvo contacto con los hombres asesinados, Cibell Naime, de quien hicieron un retrato hablado.
En 1995, mientras transcurría la investigación por el doble asesinato, el padre de CIbel acudió al Banco Unión para consultar con el gerente sobre el cheque desaparecido. Fue entonces cuando Shauki descubrió que el cheque había sido cobrado por 20.000 bolívares por un hombre llamado Miguel.
Shauki llamó al número que le ofreció el banco. Se topó con el papá de Miguel, quien le dijo que había muerto en diciembre. En esa conversación salió a la luz el tema de la venta de animales. Fue entonces cuando Shauki relacionó el cheque robado con Cibell. A pesar de la molestia por la mentira, su esposa Salam le dijo que la dejara tranquila porque estaban a punto de viajar a Estados Unidos.
El arresto de Cibell Naime y los cargos de su padre Shauki
Tras el viaje a Orlando, Shauki le dio una paliza a Cibell por mentirle. La situación que se originó por el hurto de un cheque y el robo de un gato no acabó con la golpiza. Cuando la policía descubrió la llamada del padre de Cibell, decidieron investigar a la familia.
El 18 de enero de 1995 la policía acudió a la casa de Cibell Naime y la arrestaron, junto a su hermana y su madre. Las autoridades no pudieron identificar a la mujer debido a la desfiguración del rostro, pero con el registro de huellas, el casquillo de la pistola y las declaraciones de los testigos pudieron corroborar que era la autora del doble asesinato.
La Policía también presentó cargos contra Shauki Naime por los golpes que le ocasionó a su hija Cibell. Un año después, en 1996, Cibell Naime fue condenada por el juez del Tribunal Cristóbal Ramírez Colmenarez, quien la sentenció a 30 años de prisión. Fue encontrada culpable del delito de homicidio intencional calificado y trasladada al Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF), en Los Teques. Años más tarde se le trasladó a una cárcel en Guárico, donde permaneció hasta 2005 cuando salió en libertad con permiso para trabajar.