El Barça va a ir con todo a partir de este martes para intentar la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor una vez ha sido denegada oficialmente por la Federación Española y LaLiga de forma conjunta. Los dos futbolistas, por ahora, no tienen licencia pero formarán parte de la expedición blaugrana que partirá mañana hacia Arabia Saudí para disputar la Supercopa. Todo el embrollo debe quedar definido, para bien o para mal, en cuestión de días y en el clun confían que los dos puedan jugar, al menos, la final en caso de clasificarse.
El club blaugrana va a tensar la cuerda hasta el final y la convocatoria de los dos futbolistas está decidida. Hay mucho malestar en el vestuario por cómo se está desarrollando todo y hubo un mensaje claro del capitán Ronald Araujo porque Olmo y Pau Víctor no pudieron viajar a Barbastro para disputar la Copa. La plantilla los quiere con el grupo y ha instado al club a que solvente la papeleta cuanto antes.
Olmo y Pau Víctor irán a Saudí sin saber aún nada de su situación y amparados en una competición que organiza la Federación, uno de los organismos que ha denegado su ficha. El Barça presentará a primera hora de la mañana del martes un escrito al CSD pidiendo la cautelarísima para ambos, pero no está nada claro que el CSD dictamine el mismo día ante la complejidad del asunto. Lo más probable es que los futbolistas queden en un limbo y no puedan disputar la semifinal. Si el equipo se clasifica para la final, prevista para el próximo domingo.
Tanto Pau Víctor como Dani Olmo comienzan a perder algo la confianza ante las noticias que han ido viendo en los últimos dias. Confían en la gestión ante el CSD y el club también les ha transimitido que irán a los tribunales en caso de que no haya un dictamen favorable, pero el reloj corre y existe el peligro de que puedan quedarse sin jugar buena parte del mes de enero.
Por el momento, los entornos de los dos jugadores no están realizando movimientos de mercado pero sí tienen claro que habría opciones para jugar los próximos seis meses fuera del Barça. Todo pasaría por una rescisión de contrato y firmar esos seis meses por otro club para regresar en verano al club blaugrana. Una opción rocambolesca que ningunad de las partes quiere explorar aún a fondo.
