El doblete de Kylian Mbappé ante la Real Sociedad este sábado dejó prácticamente sentenciado que se llevaría la Bota de Oro. El encuentro del Liverpool, que ha empatado 1-1 contra el Crystal Palace en la última jornada de Premier League, ha confirmado que Mohammed Salah no ha podido superar al futbolista del Real Madrid, ya que necesitaba anotar cuatro goles para arrebatarle el trono como máximo goleador del fútbol europeo.
Cuando el Madrid confirmó la contratación de Mbappé en 2024, pocos dudaban de su éxito. El campeón de Europa había fichado a uno de los mejores jugadores del mundo, si no el mejor, por lo que los éxitos estaban, para algunos, asegurados.
Pero su aterrizaje en la capital española fue complicado. Anotó en su debut oficial contra la Atalanta en la Supercopa de Europa, título que cosecharon los blancos. Pero el encaje de Mbappé en el esquema blanco no era muy evidente, y el francés fue duramente criticado por su reducida participación en el juego y su nula química con otros futbolistas, sobre todo Vinícius.
También le costó arrancar en la faceta goleadora, pues en la primera vuelta liguera anotó diez goles. No brilló tampoco en la fase liga de la Champions, en la que vio portería tres veces en ocho partidos.
Pero con el año nuevo, se enchufó. En apenas una semana (tres partidos jugados entre el 19 y 25 de enero) marcó seis goles, y todo comenzó a tener sentido. En el playoff de Champions, anotó un hat-trick al Manchester City en su primera gran noche europea en el Bernabéu, y aumentó sus registros ligueros hasta marcar 21 goles durante la segunda vuelta.
Su total en la Liga son 31 dianas, lo que le ha valido para alzarse con la Bota de Oro del fútbol europeo. Por detrás, quedan Mo Salah (29 goles) y Viktor Gyökeres (39 goles en una liga con menor coeficiente).
Mbappé es el tercer jugador del Real Madrid en levantar dicho trofeo. Hugo Sánchez lo logró una vez y Cristiano Ronaldo tres, pero ninguno de ellos lo logró en la temporada en la que aterrizaron en Chamartín, algo que inmediatamente inserta al de Bondy como el jugador más prolífico en su primer año de blanco, superando también el récord de tantos de Iván Zamorano (37) en todas las competiciones, ya que en total Kylian ha visto portería 43 veces.