Faltaba Modric por sanción. Faltaban Camavinga y Tchouaméni por lesión. Parecía que el Madrid iba a tener un problema en la zona ancha. Pero no lo tuvo. Todo lo contrario. Ceballos jugó por los tres. Se salió del mapa. Posiblemente jugó su mejor partido con la camiseta blanca. Y el Bernabéu le premió con una ovación cuando fue sustituido. El Madrid necesita a este Ceballos. Y Ancelotti también.
Tampoco jugó Vinicius, p
Pudo el Madrid hacerse con una goleada de escándalo. Pese al susto inicial, cuando aún no se había cumplido el primer minuto de juego, el Madrid ahuyentó rápido los fantasmas y al descanso ya había resuelto el partido, haciendo posiblemente el mejor partido de la temporada en el Bernabéu, tanto desde el punto ofensivo como defensivo. Asencio demostró que lo hace ahí mejor que Tchouaméni.
No aprovechó el Madrid su superioridad numérica al quedarse la Unión con un jugador menos. Quizá porque no lo necesitaba, ya que el marcador le era muy favorable. O quizá porque decidió reservar fuerzas para el partido del miércoles contra el Salzburgo, al que tiene que ganar sí o sí para asegurarse su continuidad en la Champions. Tal como estaba el partido, Ancelotti debió dar entrada antes a Arda y Endrick, como premio, entre otras cosas, por su partido ante el Celta. Al menos recuperó a Alaba, al que también necesita el Madrid.