Para la jornada de este 23 de enero, el contexto de la gran final para Cardenales de Lara era delicado, exigía aprovecharse al máximo porque de caer, contra las cuerdas, sin margen de error quedarían para el resto de la serie ante Bravos de Margarita, pero prevalecer aparte de significar empatar la disputa, implicaba retornar a su nido para buscar el título de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP).
Abajo en el careo 1-2, el mánager Henry Blanco entregó la responsabilidad de abrir a Anderson Espinoza, un brazo importante en el esquema de los alados, y cierto que no lanzó en la ronda eliminatoria, apenas completó 4 tramos en el round robin, pero su pasta, trayectoria y experiencia en Grandes Ligas lucían apropiadas para el encargo.
Y vaya manera en la que respondió, trabajo de 6 innings de solo 3 imparables en contra, 2 anotaciones, 1 limpia, 2 bases por bolas además de 1 ponche. Eso oxigenó, llenó de confianza a sus compañeros para reponerse rápido de una desventaja inicial de 2×0.
“Salí a empatar la serie, a llevarla (de regreso) a Barquisimeto”, sentenció el derecho en declaraciones posteriores a este cuarto duelo.
LVBP: Anderson Espinoza y Alí Sánchez ¡qué batería!
Muchas veces, un porcentaje importante del éxito de un lanzador obedece al desempeño de su cátcher, a la confianza que tenga en este y la batería empleada por los pájaros rojos, se vio en gran sinergia:
“Con Alí Sánchez tengo tremendísima comunicación, nos conocemos desde chiquitos, cuando participábamos en los (Juegos) Nacionales; más que un compañero de equipo lo veo como un amigo; antes del juego conversamos sobre cómo íbamos a enfrentar el line up (de Bravos); explicó el iniciador del Cardenales.
Asimismo, cierto que era bastante cuesta arriba pedirle lanzara más de 6 innings, pero esa fue la cantidad que cubrió, todo un éxito en el beisbol moderno, en una apertura de calidad que por poco no fue de blanqueo:
“Siempre salgo con la mentalidad de lanzar ceros, (…) no me sentí mal por el error. Más allá de querer lanzar ceros, aunque me hubiesen hecho cinco y el equipo hubiese hecho 10, lo importante era ganar”.
